En las Lunas...
Como si fuéramos inocentes e ingrávidos, como si no fuésemos responsables de los males del mundo, flotando, jugando a volar, sin horarios, soñando, sonriendo a todas horas, disfrutando de todas las órbitas, como dioses felices de estar a salvo de la gravedad, poseídos por la gracia, elevándonos...
lunes, 23 de mayo de 2011
Encima del aire
“Vivir en las lunas”, 2006
Varillas de acero inoxidable de distintos diámetros, alambre galvanizado, láminas de plástico recortadas, arandela, esfera de madera pintada, lámina de metacrilato, piedra volcánica...
170 x 70 x 65 cm. aprox.
Vivir en la Luna, en las lunas, sin cansancio, flotando, dispuesto a sentir momentos de libertad en los que no se es responsable de nada.
Calder en el aire
"Homenaje a Calder y a Chillida", 1992.
Madera, hierro, varillas de hierro galvanizado, plástico
120 x 50 x 40 cm. aprox.
Sobre una base sólida y pesada de madera hay unos hierros retorcidos y gastados, pesados y sólidos, al estilo de Chillida; de la parte superior de esos hierros surgen la ligereza y la levedad calderianas.
"También a mí, que soy bueno con la vida, me parece que quienes más saben de felicidad son las mariposas y las burbujas de jabón, y todo lo que entre los hombres es de su misma especie" (Nietzsche: Así habló Zaratustra").
El mar y el aire
“Dos soles en el mar”, 2008
Acrílico sobre lienzo
92 x 73 cm.
“Si fuésemos amigos no necesitaríamos la justicia; pero si fuéramos justos seguiríamos necesitando la amistad”, decía Aristóteles. Dos soles -para empezar, uno rojo y otro amarillo- y muchas estrellas sólo nos beneficiarían. Un solo Sol, una sola Luna, una sola Tierra... demasiado monótono... preferiríamos un cosmos más habitado.
El aire que no cesa
“El aire dorado”, 2009
Acrílico sobre lienzo
100 x 81 cms.
En el aire, aéreo, etéreo, elevado, no airado ni desairado, tal vez flotando, a la espera de la luz aparece una Luna que sabe crecer.
El sol en una pared
“El Sol cuando la Luna está más alta”, 2006
(Móvil para colgar de una pared)
Varillas de acero inoxidable de distintos diámetros, alambre galvanizado, aros de hierro, tubos de metal y de plástico, láminas de plástico recortadas, esferas de madera pintadas, placas metálicas, pizarra, madera...
92 x 87 x 45 cm. aprox.
Una estructura de líneas define un nuevo horizonte en la pared, un sol está esperando a que la Luna esté más alta. Se puede esperar una vida entera, pero ni un día más.
Sobre el desierto
“El Sol vivo”, 2006
Acrílico sobre lienzo
100 x 81 cm.
Hay que organizarse para llegar al Sol que está tan vivo como nosotros. Volar es necesario, saltar, jugar con el agua, la playa roja de vida, la línea asciende hacia el encuentro. La vida a veces puede ser eso, explosión de risas, alborozo, alegría infinita, colección de maravillas, colores celestiales dibujados por el trópico.
Equilibrios desde la Luna
“Equilibrios con la Luna”, 2008
Dibujo en tinta china y lápices de colores sobre papel
44 x 32 cm.
Las líneas dibujan una especie de “neurogramas” (dibujos de neuronas, en la línea de los que hacía Santiago Ramón y Cajal) que se dejan influir por las lunas de colores. No todo puede ser razón y cálculo.
El aire protector
“Alrededor de una esfera”, 2004
Varillas de acero inoxidable de distintos diámetros, alambre galvanizado, láminas de plástico recortadas, esferas de madera pintadas, chapa de zinc, esfera de yeso cristalizado, madera...
130 x 80 x 35 cm. aprox.
Hay un cielo arriba y otro abajo alrededor de una esfera, unas láminas envuelven y protegen otras esferas, toda la vida es cielo protegido.
A pesar de la entropía
“Confusión en la tierra”, 2000
Madera, esferas de acero, alambre galvanizado, varillas de acero inoxidable, plásticos, maderas, esfera de espuma de poliuretano.
172 x 80 x 45 cms. aprox.
Del cubo terrestre al Sol, de la confusión de la base a la claridad de la altura, todo acompañado por una dosis de hedonismo zen.
Lluvia de aire
“Lluvia de energía”, 2005
Acrílico sobre papel y lienzo
92 x 73 cm.
Arriba se originan los rayos, más abajo aparecen las nubes de la tormenta, en el tercer nivel el aire está limpio sobre la Tierra. Para los que saben usar la vida, la alegría y todo lo que existe, siempre llueve energía, entusiasmo contagioso y nuevas formas de vitalidad.
Preparados para vivir en el aire
“Todo estaba preparado”, 2006
Varillas de acero inoxidable de distintos diámetros, alambre galvanizado, láminas de plástico recortadas, esferas de madera pintadas, chapa de zinc recortada, pizarras, maderas...
96 x 50 x 30 cm. aprox.
Todo estaba preparado para vivir, el Sol, la Luna, las estrellas, los planetas, los arcoiris... y espirales para subir y bajar, para recomenzar todo de nuevo.
Avanzar en el aire
“Otras simetrías”, 2011
Varillas de acero inoxidable, varillas de fibra de vidrio, alambre galvanizado, PVC y esferas de madera.
114 x 94 x 60 cms. aprox.
Cuando se está a punto de saberlo todo a veces llega la niebla y… no podemos ver. San Juan de la Cruz decía: “No hemos venido a ver, sino a no ver”.
El silencio en la altura
“El silencio ondulado”, 2006
Varillas de acero inoxidable de distintos diámetros, alambre galvanizado, láminas de plástico recortadas, piezas de madera pintadas, esferas de madera y de plástico...
237 x 60 x 45 cm. aprox.
A distintos niveles se repite una línea ondulada parecida, puede ser un silencio repetido, una melodía de Juan Sebastián Bach, una alegría en el aire.
Un mundo mejor
“Un cosmos agradable”, 2003
Varillas de acero inoxidable de distintos diámetros, alambre galvanizado, esferas de madera pintadas, esferas de plástico, láminas de plástico recortadas, metal, madera...
105 x 100 x 80 cm. aprox
Hay un mundo plagado de estrellas, lunas, hay dos planetas que tienen señalados paralelos y meridianos, un juego de orden y caos y esperanza.
Para ascender entre los árboles
“Ailanto: árbol del cielo”, 2001
Cubo, esfera y fragmento de madera, roca volcánica, varillas de acero inoxidable, alambre galvanizado, esfera de acero.
200 x 75 x 30 cms. aprox.
Elevarse con sentido, con gusto, por la necesidad misma de probar la ingravidez, puede ser uno de los signos de los icebergs aéreos.
jueves, 19 de mayo de 2011
Mis padres
“La tierra y la casa de mis padres”, 1999
Óleo sobre lienzo
162 x 130 cms.
Cuando los padres se alejan… muchas cosas ya no están cuadriculadas, algo nuevo aparece, algo se eleva, el escepticismo puede llegar a ser místico y podemos ser más humanos.
Si fuera místico, me haría materialista. Si fuera materialista, me haría místico.
Lunas con reflejos
“Diez lunas en un pentagrama”, 2009.
Acrílico sobre lienzo
146 x 114 cm.
En un universo soñado, entre formas redondeadas amarillas y una inmensa alegría, hay un pentagrama en el que 10 lunas indican una música de las esferas incompleta. Más abajo hay muchas letras, muchos nombres; algunos intentan escribir y explicar lo que sucede, pero casi ninguno lo consigue. No importa, aunque no se entienda mucho, podemos seguir.
La foto tiene un reflejo extraño.
Triángulos para ascender
“Triángulos para ascender hasta el aire”, 2001
Varillas de acero inoxidable de distintos diámetros, alambre galvanizado, esferas de madera pintadas, formas metálicas, muelle, maderas ...
275 x 95 x 55 cm. aprox.
Tres elementos en la base unidos, del más grande sale un punto de apoyo que permite las elevaciones siguientes; un triángulo metálico, tres elementos verticales, tres elementos ascendiendo más arriba... ascendiendo sin encontrar límites... y seguir hacia arriba con un anillo blanco.
miércoles, 18 de mayo de 2011
El árbol y la alegría
“El árbol de la alegría”, 2007
Acrílico sobre lienzo
92 x 73 cm.
El árbol de la ciencia de la alegría y de la felicidad ha florecido, se ha rodeado de lunas, de nieve, de signos astronómicos... se pueden comer sus frutos, no hay prohibiciones, no hay condenas... la naturaleza nos regala todo su entusiasmo.
Palabras importantes
“El corazón de las palabras”, 2008
Acrílico sobre lienzo
92 x73 cm.
Las palabras que usamos todos los días deberían tener un corazón mimoso que jugase a todas horas, para aumentar así la alegría entre todos los seres humanos. Deberían ser palabras hermosas, rojas, inocentes, cristalinas, sonrientes... palabras y letras que esperan un mundo lleno de lunas y estrellas... palabras para entenderse y no dejar a nadie abandonado
Vivir más arriba
“100 lunas”, 2010
Varillas de acero inoxidable, plástico, PVC.
310 x 240 x 75 cms. aprox.
Sentar la cabeza y vivir en la Luna, en 100 lunas.
Vacíos y formas
Del vacío surgen nuevas formas, por eso más que un vuelo planeado lo que hay es una disposición para recoger lo que aparece y se muestra.
“Puntos de ajuste”, 2011
Varillas de acero inoxidable, alambre galvanizado, PVC y plástico.
120 x 55 x 40 cms. aprox.
Para ajustar la realidad y lograr que coincidan aspiraciones, ideales, anhelos, valores y deseos, es necesaria una especie de ingeniería mental zen muy sofisticada, casi inmaterial.
Liviano
La mejor ligereza permite ascender o, al menos, no participar en la caída. Las torres más altas deberían permanecer, sin más pretensiones que las de estar a la altura.
“Expansión”, 1985-2010
Cartón pintado, cubo de madera, esfera de plástico, varillas de acero inoxidable, alambre galvanizado.
130 x 110 x 35 cms. aprox.
La expansión que produce una sonrisa perfecta genera colores y formas, palabras y más vida.
Homenaje
Homenaje a Calder y a Chillida, al aire y a las rocas, al encuentro entre lo ligero y lo pesado, entre la gracia y el prisma regular.
"Homenaje a Calder y a Chillida", 1992.
Madera, hierro, varillas de hierro galvanizado, plástico
120 x 50 x 40 cm. aprox.
Sobre una base sólida y pesada de madera hay unos hierros retorcidos y gastados, pesados y sólidos, al estilo de Chillida; de la parte superior de esos hierros surgen la ligereza y la levedad calderianas.
"También a mí, que soy bueno con la vida, me parece que quienes más saben de felicidad son las mariposas y las burbujas de jabón, y todo lo que entre los hombres es de su misma especie" (Nietzsche: Así habló Zaratustra").
Algunas cosas están dispuestas
Como decía el maestro Italo Calvino al final de su genial obra "Las ciudades invisibles":
"El infierno de los vivos no es algo que será; hay uno, es aquél que
existe ya aquí, el infierno que habitamos todos los días, que formamos
estando juntos. Dos maneras hay de no sufrirlo. La primera es fácil para
muchos: aceptar el infierno y volverse parte de él hasta el punto de no
verlo más. La segunda es peligrosa y exige atención y aprendizaje
continuos: buscar y saber reconocer quién y qué, en medio del infierno,
no es infierno, y hacerlo durar, y darle espacio".
martes, 17 de mayo de 2011
lunes, 16 de mayo de 2011
Sobre la exposición
JUEGOS EN EL AIRE
Lo primero quiero agradecer a Román Álvarez, Consejal de Cultura del Ayuntamiento de Avilés, su invitación para exponer aquí, en esta magnífica sala.
También quiero agradecerle a Jorge Iván toda la ayuda y la buena disposición para ir armando todo este tinglado de fechas, fotos, catálogo, cartel… A Manolo, que trabaja aquí, en el CMAE y que me ha ayudado en todo el montaje con infinita amabilidad y la mejor disposición. A mi amigo Omar por toda su ayuda y por la introducción tan generosa que ha escrito para el catálogo. A todos vosotros por estar aquí. Incluso tengo que agradecerles a los que viven conmigo la paciencia que tienen soportando vivir en una casa que está invadida por estos artilugios móviles, ya os podéis imaginar.
Tenía miedo al exponer en el CMAE (centro Municipal de Arte y Exposiciones), de que alguien pudiera pensar que esto que aquí vemos son obras de arte; me asusta tanta grandilocuencia. Tengo que confesar que tuve suerte al tropezar con el filósofo francés Alain Badiou y con sus “15 tesis sobre el arte contemporáneo”, ya que en la tesis nº 12 dice que el arte:
“debe estar tan sólidamente construido y ser tan riguroso como una demostración matemática, tan inesperado y sorpresivo como un ataque nocturno y tan elevado como una estrella”.
Pues bien, al leerlo sonreí y me sentí a salvo, estos artefactos que construyo y estas superficies que pinto no están construidas con solidez; no son rigurosas ni pretenden demostrar nada; tampoco son sorprendentes, ya que se insertan en unas corrientes del arte contemporáneo más o menos reconocibles. Lo que sí me fastidia es que no sean tan elevados como una estrella, y eso que lo intento subiendo siempre que puedo a las montañas.
Una vez que ya sabemos que esto no es arte, ya podemos respirar tranquilos y disfrutar -si se puede- de lo que en esta magnífica sala se expone.
Y es que a mí me pasa -salvando las distancias- como a Miguel Hernández, “no perdono a la vida desatenta”, tal vez porque me gustan más “los altos andamios de las flores” y “pajarear en las almas colmeneras”.
No sé ni estoy seguro, pero creo que un poco de hedonismo utópico nos puede venir a todos bien para superar ese estilo de desastres como la guerra, Fukushima o cualquier terremoto, también el de Murcia.
Como decía el maestro Nietzsche:
“También a mí, que soy bueno con la vida, me parece que quienes más saben de felicidad son las mariposas y las burbujas de jabón, y todo lo que entre los hombres es de su misma especie”.
Y como decía mi gran maestro Alexander Calder:
“Cuando todo sale bien, un móvil es una poesía que baila con la alegría de la vida y sus sorpresas".
A ver si algún día me sale uno bien.
Lo primero quiero agradecer a Román Álvarez, Consejal de Cultura del Ayuntamiento de Avilés, su invitación para exponer aquí, en esta magnífica sala.
También quiero agradecerle a Jorge Iván toda la ayuda y la buena disposición para ir armando todo este tinglado de fechas, fotos, catálogo, cartel… A Manolo, que trabaja aquí, en el CMAE y que me ha ayudado en todo el montaje con infinita amabilidad y la mejor disposición. A mi amigo Omar por toda su ayuda y por la introducción tan generosa que ha escrito para el catálogo. A todos vosotros por estar aquí. Incluso tengo que agradecerles a los que viven conmigo la paciencia que tienen soportando vivir en una casa que está invadida por estos artilugios móviles, ya os podéis imaginar.
Tenía miedo al exponer en el CMAE (centro Municipal de Arte y Exposiciones), de que alguien pudiera pensar que esto que aquí vemos son obras de arte; me asusta tanta grandilocuencia. Tengo que confesar que tuve suerte al tropezar con el filósofo francés Alain Badiou y con sus “15 tesis sobre el arte contemporáneo”, ya que en la tesis nº 12 dice que el arte:
“debe estar tan sólidamente construido y ser tan riguroso como una demostración matemática, tan inesperado y sorpresivo como un ataque nocturno y tan elevado como una estrella”.
Pues bien, al leerlo sonreí y me sentí a salvo, estos artefactos que construyo y estas superficies que pinto no están construidas con solidez; no son rigurosas ni pretenden demostrar nada; tampoco son sorprendentes, ya que se insertan en unas corrientes del arte contemporáneo más o menos reconocibles. Lo que sí me fastidia es que no sean tan elevados como una estrella, y eso que lo intento subiendo siempre que puedo a las montañas.
Una vez que ya sabemos que esto no es arte, ya podemos respirar tranquilos y disfrutar -si se puede- de lo que en esta magnífica sala se expone.
Y es que a mí me pasa -salvando las distancias- como a Miguel Hernández, “no perdono a la vida desatenta”, tal vez porque me gustan más “los altos andamios de las flores” y “pajarear en las almas colmeneras”.
No sé ni estoy seguro, pero creo que un poco de hedonismo utópico nos puede venir a todos bien para superar ese estilo de desastres como la guerra, Fukushima o cualquier terremoto, también el de Murcia.
Como decía el maestro Nietzsche:
“También a mí, que soy bueno con la vida, me parece que quienes más saben de felicidad son las mariposas y las burbujas de jabón, y todo lo que entre los hombres es de su misma especie”.
Y como decía mi gran maestro Alexander Calder:
“Cuando todo sale bien, un móvil es una poesía que baila con la alegría de la vida y sus sorpresas".
A ver si algún día me sale uno bien.
Agradecimientos
Quiero agradeceros vuestra presencia a todos los que me acompañásteis en
la inauguración del viernes en el CMAE. Está claro que sin vosotros
nada de aquello tendría sentido ni importancia. Aunque, para ser
sinceros, sentido tenía poco (algunas exploraciones sobre "los altos
andamios de las flores", que diría Miguel Hernández); y la importancia
muy relativa, algo de movimiento alegre y de vitalidad colorista. Nada
que no sepa todo el mundo.
Como diría el maestro Nietzsche:
“¡Y, en el fondo, cuántos nuevos ideales son todavía posibles! He aquí un pequeño ideal, que yo atrapo una vez cada cinco semanas durante un paseo salvaje y solitario, en el azul instante de una felicidad criminal. Pasar la propia vida entre cosas delicadas y absurdas; ajeno a la realidad; medio artista, medio pájaro o metafísico; sin sí ni no para la realidad, a no ser que de vez en cuando se la reconozca con la punta de los pies, a la manera de un buen bailarín; cosquilleado en todo momento por algún rayo de sol de la felicidad... y colgando un pequeño rabo de burla hasta a lo más santo” (Fragmentos Póstumos, marzo-julio, 1888).
(No cada cinco semanas, intento hacerlo todos los días o, al menos todos los sábados por las altas montañas).
Saludos, Faustino
Como diría el maestro Nietzsche:
“¡Y, en el fondo, cuántos nuevos ideales son todavía posibles! He aquí un pequeño ideal, que yo atrapo una vez cada cinco semanas durante un paseo salvaje y solitario, en el azul instante de una felicidad criminal. Pasar la propia vida entre cosas delicadas y absurdas; ajeno a la realidad; medio artista, medio pájaro o metafísico; sin sí ni no para la realidad, a no ser que de vez en cuando se la reconozca con la punta de los pies, a la manera de un buen bailarín; cosquilleado en todo momento por algún rayo de sol de la felicidad... y colgando un pequeño rabo de burla hasta a lo más santo” (Fragmentos Póstumos, marzo-julio, 1888).
(No cada cinco semanas, intento hacerlo todos los días o, al menos todos los sábados por las altas montañas).
Saludos, Faustino
Exposición en el CMAE

Como la semana pasada este blog no funcionaba no pude invitar a la inauguración. Lo siento. Esto es una invitación para asistir a la más reciente exposición de Faustino López, "Juegos en el aire", que tendrá lugar entre los días 13 de mayo del 2011 hasta el 3 de junio en la sala de exposiciones del CMAE en Avilés, de lunes a sábado, de 11.00 a 13.00 horas y de las 18.00 a las 21.00 horas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario